¿Algo mas que un los dos?
Creo que no podría haber pedido nada mejor.
Finalmente éramos uno, como lo habíamos planeado, imaginado, anhelado en
nuestras cabezas tanto tiempo.
Éramos dos espíritus fundidos en un mismo abrazo. Brotaba el deseo de los
poros, las pieles tan juntas el amor (porque de seguro eso es lo que era) que
vagaba por el aire. Tu mirada posada en la mía me decía que esto que teníamos
valía mas que las miles de palabras que ya nos habíamos dicho y que sabíamos de
memoria. Una explosión y las lágrimas no se hicieron esperar. Te quería si,
como te quise en aquel momento.
Impaciencia. ¿Podía haber quedado algo de todo lo que habíamos planeado
meticulosamente al azar? ¿Era posible? No lo sabia, y de ahí mi ansiedad.
Porque hacia falta tiempo para comprobar si habíamos sido presa del destino que
nos había permitido hacernos uno, para dejar de ser dos. Maldito el tiempo que
va a contramano de lo que queremos, que cuando queremos que vuele solo deambula.
No hay comentarios:
Publicar un comentario